miércoles, 25 de abril de 2012

Arthur Alexander "(Go to him)"






  Existen personajes indispensables en la historia de la música popular moderna, gente cuya influencia es fundamental y definitoria en la evolución de los distintos géneros musicales. Creadores de talento, cuya especial sensibilidad ha dejado huella en otros artistas posteriores, sin embargo no todos estos músicos gozaron, en su momento, de un reconocimiento adecuado a su talento. Con el tiempo, y gracias a su legado (aunque sea en voces de otros), su figura y popularidad crece, recuperandose como "artista de culto" paro los aficionados a la música. Posiblemente, este pueda ser el caso de nuestro artista de hoy, un grande del Soul y el R&B, que también supo abrir el camino para otros cantantes de color a sonidos, que durante mucho tiempo tuvieron "vetados", como el Country. Un nombre indispensable para entender la música a partir de los años 60, hoy visita nuestro (vuestro) blog, Mr. Arthur Alexander...

  Hijo de un guitarrista semi profesional de Blues, Arthur Alexander Jr. vivió rodeado de música desde que nació el 10 de Mayo de 1940, en Florence, Alabama, un estado segregado del Sur de los EEUU. Esta especial circunstancia le hace convivir con los sonidos "negros" como el Blues slide o bottleneck, que su padre y sus amigos gustaban de interpretar, y los "blancos", como el Country o el Hillbilly, que las emisoras locales programaban para el publico mayoritario. En sus primeros años de colegio, Arthur, se une al coro de Gospel de la iglesia local, en esa época, y siempre con una mente abierta, se empapa de toda clase de influencia musical, intentando capturar para sí mismo, lo mejor de cada una de ellas. En su casa la única música negra que se escuchaba, eran los Blues de su padre o el Gospel, sin embargo en la radio, Arthur, solía disfrutar de gente como Red Foley o Patti Page.



Alexander no sabía tocar ningún instrumento, su principal baza era su elegante voz (algo que John Lennon admiraba, e intentó imitar en más de una ocasión). A mediados de los 50 lideraba su propia banda de Gospel mientras trabaja como botones de un hotel, allí conoce a Tom Stafford, un joven aficionado al R&B que se las daba de letrista. Junto a él comienza a componer temas, evolucionando significativamente hacia el Rock & Roll, pronto aparece en Shows televisivos locales, gracias al buen ojo de productores como Rick Hall. Es precisamente este poductor quien brinda a Arthur (acreditado como "Junior" Alexander) la posibilidad de grabar su primer sencillo "Sally Sue Brown" (Judd Recods 1961) para el sello de Jud Phillips (hermano de otro productor muy famoso, Sam, de Sun Records). Pero habrá que esperar un año más para que Alexander entrara por primera vez en el top USA, fue un tema grabado en Muscle Shoal para Dott Records. El éxito del incombustible tema, "You better move on", que llegó al 24 de las listas, pondría a Arthur en el epicentro de la fama, y le reportaría pingües beneficios. Aquel precursor sonido propició que el lugar donde se realizó aquella grabación, un almacén de tabaco abandonado, reconvertido en estudio de grabación, con el tiempo se convirtiera en uno de los sellos más legendarios de la música pop. Los estudios Fame de Muscle Shoals, toda una "Soul Factory" por la que pasarían estrellas como Etta James, Aretha Franklin, Joe Tex, Wilson Pickett... En especial cuando dos años más tarde los Rolling Stones arrasaran con una arenosa versión de la canción de Alexander ... aunque para ser justos, la banda de Manchester, the Hollies, lo hicieron antes, aunque con un poco menos de suerte...


Ese mismo año se acerca de nuevo al triunfo con composiciones propias, "Go home girl", y en especial, "Anna (go to him)", un tema que llama poderosamente la atención de otro grupo británico, The Beatles, que deciden incluir una estupenda versión del tema en su álbum debut Please Please Me en 1963. Ese mismo año, los Fabfour también graban para la BBC, en una sesión memorable, otro genial de Alexander "Soldier Of Love". Los siguientes años sigue componiendo e interpretando sus temas, aunque nunca más logra acercarse al éxito de "You Better Move On", otros temas suyos gozan de cierta popularidad, interpreta tambien temas de otros, combinando Blues, Country, Soul... "You're The Reason", "I Hang My Head And Cry", "A Shot Of Rhythm And Blues"... A finales de los 60 realiza un buen puñado de extraordinarias grabaciones en el subsidiario Sound Stage Seven de Monument, cuna del mejor country/soul de la época, una joya melódica (para los aficionados a este género) con grandes momentos como "Cry like a baby" o "Glory road". A mediados de los 70 vuelve a acercarse a las listas con un desfasado "Everyday I Have To Cry Some", es su final. Realiza algunos duetos junto a Carl Perkins, y acaba retirandose del negocio, reconvertido en conductor de Autobuses. Finalmente, en 1993, decide retomar su carrera y forma una pequeña banda, tiene un contrato de grabación y todo, pero ese mismo año fallece de un paro cardiaco, tras haber dado un concierto en Nashville, Tennessee.

Por su especial influencia en el pop, en el germen de la "British Invasion", y en la música en general, Arthur Alexander merece una mención especial, cientos de grupos han interpretado sus temas, y su huella es especialmente relevante en varias figuras indispensables del pop del pasado siglo XX. Pionero, innovador, un artista suave y melódico, sin embargo a contracorriente, al que hoy dedicamos nuestro pequeño espacio...Arthur Alexander Jr...



jueves, 19 de abril de 2012

Sanford Alligator Band " Supervillanos del Soul"









Cierto tipo de géneros musicales parecen resurgir ciclicamente, recuperando, temporalmente, a modo de "revival" su esplendor, sin embargo existen otros que no necesitan de modas ni regresos por que, simplemente, siempre han estado ahí. Se mantienen vivos y frescos a lo largo del tiempo, aunque, eso sí, parecen mantenerse en un segundo plano en determinadas ocasiones, este es el caso del Soul. Debido a los exigentes cánones impuestos al mercado musical por los cuatro cabezas huecas que dirigen y manejan los hilos de radio-fórmulas y programaciones musicales en general, géneros como el Jazz, el Blues o el Soul sobreviven marginados en el ostracismo musical. Sin embargo tienen una audiencia fiel y exigente que consume y disfruta de sus nuevas propuestas con entusiasmo. De vez en cuanto, gracias a algún artista que se pone de moda (vease Amy Whinehouse, Eli “Paperboy” Reed, Duffy...) los productores comienzan a buscar sonidos similares, y fabrican un falso renacer del género, no es justo pero es así, y bueno, pues hay que aprovecharlo, la moda pasará y el Soul, y sus interpretes, seguirán ahí, al pié del cañón...

   Me encanta "descubrir" nuevos artistas, me excito y me emociono compartiendo mi hallazgo con todo aquel que pueda disfrutar de ello. Esto mismo me pasó hace algunos meses cuando mi primo (músico de pro) me mostró el trabajo de este increíble combo nacional, máquina del ritmo con alma negra, que desde Valencia, adaptan el estilo de figuras de la Motown, Stax o Atlantis Records, sin parecer una mera copia, combinando elementos del Gospel, el funk, el Groove, el Sonido Philadelphia... en una propuesta autentica y creíble. Ni que decir tiene que tardé sólo los 3 minutos que duraba aquel tema, en comprar
online (http://sanfordalligatorband.bandcamp.com/) este fantástico disco llamado "Gimme the Money".



Sanford Alligator Band, que así se llama el grupo, se formaron en 2006, en Alboraya (Valencia), sus integrantes tienen diversas influencias y gustos musicales, de hecho, algunos de ellos compaginan esta con otras bandas de distinto estilo sonoro, sin embargo todos ellos tienen un punto en común, un sincero y apasionado gusto por la música negra, en especial por los sonidos que emergían a mediados de la década de los 60 y principios de los 70. Con las ideas muy claras fueron ganándose a pulso un lugar en el circuito musical de la Comunidad Valenciana, hasta que en 2010 lograron el espaldarazo que les ayudaría a dar un paso más, alzándose como ganadores del “Sona La Dipu” (concurso de pop rock promovido por la Diputacion de Valencia), su popularidad va en aumento, se prodigan por escenarios, compartiendo en ocasiones con artistas de "primera fila", y se meten en el estudio para grabar su primer trabajo discográfico.

 Este maravilloso disco es toda una declaración de intenciones, destila Pop, Funk, Soul y buen rollo por cada una de sus notas. Comienza tocando el cielo de Funk setentero con "Funky Revenge", con unos coros elegantes e inspirados y una sección de viento realmente espectacular. Es entonces cuando crees que ya sabes de que va la cosa, y comienza "Gimme The Money", su magistral inicio te traslada frente al coro de una iglesia de Harlem con un hermano blanco de James Brown al frente. Las voces femeninas también adquieren protagonismo en el tercero de sus cortes, "I am not in love" (una de mis preferidas) nos traslada el espíritu de gente como Dionne Warwick o Deniece Williams. No os voy a descubrir más del disco, por que espero (y confío) que invirtáis unos pocos eurillos en disfrutarlo vosotros mismos, aunque sí quiero hacer especial mención al tema elegido por la banda como carta de presentación, con el acertado título de "In Soul We trust", un excelente tema donde Rock, acid jazz y funky-soul se codean en un coctel distinguido, acertado y con el estilo y la clase que caracteriza a esta sorprendente banda.


 Los diez componentes de la Sanford Alligator Band, son excelentes músicos, pero conscientes de que su estilo musical es algo más, combinan su ritmo con una excelente puesta en escena, un look cool, elegante, cuidando los detalles y mimando a su público. El mundo puede disfrutar de una nueva manera de vivir  la música negra, imaginada por músicos de otra generación y cultura, gente que están haciendo bien las cosas, reviviendo los sonidos de la vieja y majestuosa escuela. Además van sobrados de sentido del humor e ingenio, no encuentro mejor definición para esta banda que la que ellos mismos proponen: "Dice la leyenda que cada 100 años aparecen en nuestro mundo unos seres oscuros que transgreden su entorno musical y fustigan a golpe de Soul y Funk a todo aquel que se deja atrapar por sus cantos de sirena, convirtiéndoles en sus esclavos para siempre... La Asociación de Supervillanos del Soul, más conocido como "The Sanford Alligator Band", es un ejército de sinceros servidores del Soul, adictos al Groove y siervos incombustibles del ritmo más negro. Bajo su piel escamosa, no circula sangre fría como en los demás reptiles, sino caliente y desbocada. Su filosofía: "Haz lo que quieras, pero hazlo con ritmo, poniendo en ello el corazón, el alma, el culo, los cojones y todas las demás vísceras. Y ante todo recuerda que, la mayoría de las veces, si no sudas, es que no lo estás haciendo bien"....Larga vida al Soul!!

jueves, 12 de abril de 2012

Versión Original: "I will follow him"





Fue precisamente en abril, pero de 1963, que una quinceañera de Pennsylvania llamada Margaret Annemarie Battavio, llegaba al número uno de las listas de éxitos en los Estados Unidos con su segundo single con RCA, "I will follow him" (el primero, "Little Me" fue un año antes, y pasó bastante desapercibido). Más conocida como Little Peggy March, se convirtió en la artista femenina más joven de la historia en entrar y lograr un top ten de la prestigiosa lista Billboard. La canción se mantuvo durante 3 semanas en lo más alto, su popularidad da la vuelta al mundo y consigue dominar las listas de Australia, Japón, Nueva Zelanda y Escandinavia, en casi toda Europa se coloca entre las 10 primeras.

"I will follow him" fue un tema precursor en el sonido "girl groups" de aquellos primeros 60, la trancisión entre los grupos de chicas con influencias del Doowop, el Rithm&Blues o el Soul, hacia un terreno mas abierto, hacia el Pop. Sin embargo, a pesar del tremendo éxito de la canción, la carrera de la pequeña Peggy no funcionó como se esperaba. La razón principal fue el ansia desmedida de quienes dirigían su carrera y querían explotar rápidamente aquel filón, así que eligieron demasiado apresuradamente una serie de singles que sólo consiguieron que la joven cayera en el olvido musical. Sin embargo, fue su popularidad en Europa lo que la mantuvo a flote, y consiguió salvar su carrera en Alemania, donde logró cotas de popularidad realmente notables...Ya que estamos en Europa vamos a retroceder un poco más en el tiempo, en busca del origen de esta canción tan popular...



Y es que este tema ya había logrado el número uno de las listas un año antes, pero las de Francia. La interprete que logró este hit no era francesa, en realidad había nacido en Surrey (Inglaterra) en 1932. Petula Sally Olwen Clark había tenido una exitosa carrera como cantante y actriz infantil para la BBC (tanto en radio como en televisión), durante la década de los 50 fue forjándose una sólida carrera musical en las islas británicas, hasta que, en 1958 fue invitada a cantar en el Olympia de París, donde, a pesar de su miedo a no gustar al público francés y arrastrar un tremendo resfriado, consiguió un tremendo éxito. Al día siguiente le ponían sobre la mesa un contrato de grabación con Vogue, sus dudas se disiparon en cuanto conoció a uno de los publicistas de la compañía, Claude Wolff, del que se enamoró nada más verle. Así que se quedó en Francia hasta que consiguió cazar al muchacho, con el que se casó en 1961.



Mientras tanto conseguía gran popularidad en toda Europa, sale de gira con Sacha Distel, graba varios singles de éxito ("Sailor", "Romeo", "Ya-ya twist"...) , en inglés, francés, español... Hasta 1962 cuando le ofrecen grabar "Chariot", un tema instrumental escrito por Franck Pourcel (usando el seudónimo J.W. Stole) y Paul Mauriat (Del Roma), al que Jacques Plante había puesto letra (en francés). El éxito vino rodado, número 1 en Francia y 8º en Bélgica, proporcionando a Petula Clark su primer disco de oro. Un año más tarde ella misma también lanzaría al mercado su versión en inglés, aunque no obtuvo mucha repercusión, sobre todo por que la de Peggy March arrasaría con toda competencia.

 Y así llegamos a la primera vez que se grabó el tema, fue también en 1961, era un instrumental que formaba parte del LP ".. Amour, danza, Et Violons N º 17", interpretado por su creador, el compositor, director de orquesta y magnífico arreglista Franck Marius Pourcel, que (como ya he dicho) había escrito el tema junto a su colega, y también director de orquesta Paul Mauriat, los arreglos fueron acreditados a Raymond Lefèvre. Aunque todo esto es anecdótico, y queda como curiosidad ante el tremendo éxito que "I will follow him" tuvo en todo el mundo, una canción que ha sido interpretada por cientos de artistas en decenas de idiomas, y que posiblemente, los mas jóvenes, la recuerde de alguna película, interpretada por un coro de simpáticas monjitas...Un saludo, y hasta pronto amigos!

viernes, 6 de abril de 2012

Canciones con Historia: "My Sharona"





En la historia de la música pop existe un fenómeno, que la mayor parte de la prensa expecializada denomina "One hit wonder", un fenómeno musical que da nombre a aquellos grupos o artistas cuya fama se debe a un sólo éxito, un tema que alcanzó en su momento una gran popularidad, y que trasciende a lo largo de los años más allá de la propia banda que lo llevó al éxito. Normalmente se tratan de temas que se recuperan a lo largo de los años en bandas sonoras o spots publicitarios, que son recordados con nostalgia por muchos aficionados, mientras los artistas que los interpretaron practicamente pasaron al olvido sin llegar nunca mas a tocar la cima de las listas de exitos, el tema que hoy nos ocupa, se puede integrar entre estos "one hit wonder's", pero no por eso deja de tener una historia interesante tras su estela de popularidad.

Sharona Alperin, era una estudiante de 16 años, nacida en Fairfax, que estudiaba en un instituto de Los Angeles, su aspecto moderno y rebelde le daba un aire un tanto más seguro y adulto al del resto de sus compañeras de estudios. A Sharona le gustaba el rock y el power-pop de moda en aquellos años 70, compaginaba sus estudios con un trabajo a tiempo parcial en una tienda de ropa de moda de la ciudad. Un buen día de 1978, un joven músico de Detroit llamado Lars Douglas "Doug" Fieger entró por casualidad en la tienda donde Sharona trabajaba, Doug, de 27 años había tocado en diversas bandas y ahora andaba metido en un nuevo y prometedor proyecto musical, aún sin una definición clara. El caso es que el muchacho cuando entró en la tienda y vio a aquella preciosa chica sufrió un verdadero shock, años más tarde confesaría: "fue como recibir un tremendo golpe en la cabeza con un bate de béisbol, me enamoré de ella al instante", "Jamás conocí a una mujer como ella, inducía a la locura. Tenía una presencia muy fuerte, una despreocupación natural y, sin embargo, gran seguridad en si misma. Además usaba un penetrante perfume que me volvía loco".



Evidentemente Doug intentó inmediatamente ligar con la chica, pero Sharona lo rechazó de inmediato. Aquel encuentro provocó algo en el músico y comenzó a escribir febrilmente un montón de canciones para aquella sensual joven, finalmente, y con ayuda del guitarrista de su banda, "The Knack", Berton Averre (que aportó un original y potente riff de guitarra que había compuesto antes, pero nunca había podido utilizar) dieron forma, inspirandose en la base rítmica de un viejo tema de Smokey Robinson & the Miracles: "Going to a Go-Go", a un tema que, a su vez, se convertiría en el single de lanzamiento de su primer disco "Get the Knack". El pegajoso riff y su memorable estribillo, convirtió "My Sharona" en un número uno en muy pocas semanas, en tan solo 15 dias vendieron mas de de un millón de copias, algo que no ocurría desde 1964, año en que los Beatles consiguieran este record con "I wanna hold your hand". En ese momento Doug ya tenía a Sharona en el bote, la chica había dejado a su novio para acompañar a la banda en su gira, protagonizar la portada del disco (marcando un estilo para toda una generación de adolescentes americanas) y vivir una historia de amor, que tan sólo duro tres años.

La banda nunca consiguió repetir el éxito de aquel primer disco, aunque continuaron en activo hasta 2005."My Sharona" es su legado, un tema reconocible, pegadizo, potente y directo, creado con la "sana" intención de seducir a una menor de edad. Una canción que seguro habéis escuchado en miles de garitos y discotecas, y que merece un pequeño reconocimento, al menos por los cientos de veces que hemos coreado, ebrios y enfervorizados su inolvidable estribillo...My my my my Sharona!